El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, nombró a Julio García Zerpa como nuevo ministro de Servicios Penitenciarios, en un esfuerzo por combatir la corrupción en el sistema carcelario del país. Este cambio se produce después de que casi una cuarta parte de las prisiones venezolanas iniciaran una huelga de hambre el 9 de junio, denunciando sobornos y corrupción por parte de los funcionarios.
Durante su programa de radio, Maduro destacó la necesidad de construir una nueva gobernabilidad en el sistema penitenciario y erradicar la corrupción. «Tenemos que forjar y formar una nueva generación de custodios. No puede ser que al penado o al detenido se le cobre por llevarlo hasta el baño», afirmó el mandatario, quien también solicitó el fin del «retardo procesal».
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Julio García Zerpa, abogado y diputado del Parlamento, reemplaza a Celsa Bautista, quien ocupaba el cargo desde febrero de 2023. Zerpa prometió realizar cambios estructurales para robustecer el sistema de justicia y optimizar los procesos, además de abordar las redenciones de penas, una de las demandas de los presos en huelga.
El Observatorio Venezolano de Prisiones (OVP) informa que 19 centros penitenciarios, seis anexos femeninos y 30 calabozos policiales están en huelga. Los detenidos exigen medidas humanitarias, traslados a sus penales de origen, y denuncian malos tratos, insuficiencia alimentaria y un hacinamiento de hasta el 200%.
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Una madre de un preso trasladado desde Tocuyito a una prisión en Mérida, a 500 kilómetros de los tribunales que llevan su causa, denunció las condiciones deplorables: «A mi hijo le ha tocado comer carne verde (descompuesta)». Lleva ocho meses sin ver a su hijo, quien está en huelga de hambre desde hace cuatro días.
La población carcelaria en Venezuela es de unos 54.000 prisioneros, según cifras oficiales. Varias cárceles en huelga fueron intervenidas en 2023 para desmantelar bandas criminales que operaban dentro de los recintos.
FUENTE: DW.