En noviembre de 2024, las ventas minoristas pymes registraron una caída del 1,7% interanual, acumulando una baja del 12,2% en lo que va del año.
A pesar de este descenso, se observó un crecimiento mensual desestacionalizado del 3,9%. Los comercios enfrentaron aumentos en los precios de los proveedores, pero a través de promociones y ajustes en los precios lograron estabilizar la situación.
El informe, elaborado por la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME), reveló que, a pesar de la caída generalizada, algunos rubros experimentaron un comportamiento positivo. Alimentos y bebidas aumentaron 4,4%, mientras que calzado y marroquinería registraron un alza de 2,6%. Estos sectores destacaron por la mayor demanda y promociones atractivas que impulsaron las compras en el último tramo del año.
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Por otro lado, sectores como perfumería y farmacia vieron fuertes caídas en sus ventas, con descensos del 15,4% y 10,4%, respectivamente. En estos rubros, los consumidores priorizaron productos esenciales, lo que afectó a artículos considerados de lujo, como perfumes y tratamientos especializados. A su vez, el crecimiento del comercio electrónico desvió parte de las ventas de las tiendas físicas hacia plataformas en línea.
En el caso del sector de bazar, decoración y textiles para el hogar, las ventas cayeron un 9,4%, aunque las expectativas mejoraron levemente gracias a la estabilidad en los precios y el impulso de promociones. Los comerciantes reportaron un aumento en la oferta de productos importados, lo que permitió ofrecer precios más competitivos en el mercado.
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La caída de la demanda en sectores como la perfumería y la farmacia, junto con la estabilización en otros rubros, muestra cómo las pymes están adaptándose al contexto económico. A pesar de las dificultades, muchas empresas han tomado medidas para ajustar sus estructuras financieras, como la reducción de costos y la exploración de nuevos canales de venta, lo que les ha permitido sobrevivir ante los obstáculos que enfrenta el mercado.
En cuanto a los reclamos, la principal preocupación sigue siendo la carga impositiva, con un 66% de los comercios pidiendo una reducción de impuestos. Además, otros temas importantes incluyen la simplificación burocrática y el fortalecimiento de la demanda interna, medidas necesarias para enfrentar la crisis que afecta a las pymes en todo el país.
Fuente: CAME.