“Los controladores aéreos de nuestro país son muy capaces y responsables, pero también son humanos”, justificó el funcionario en diálogo con Télam.
Dietrich precisó que el incidente que se conoció este martes por la mañana, que involucró a un piloto de Austral y una controladora aérea de la Torre de Ezeiza, quienes se insultaron cuando el primero reclamó que otro avión había pasado muy cerca de su posición, “está siendo investigado por la Empresa Argentina de Navegación Aérea (EANA)”.
“Hay que tener en cuenta que hay miles de vuelos en el país y el trabajo que hacen los controladores aéreos es excelente. Hay una comunicación muy fluida con los pilotos, por lo que hay que investigar bien este caso para saber qué sucedió”, insistió.
El ministro dijo además que se está “dotando al sistema de la tecnología necesaria para respaldar el trabajo de los controladores y evitar que ocurran cosas como ésta”.
“Hemos trabajado sobre los equipamientos en los controles de vuelos, en las pistas y estamos haciendo obras en casi todos los aeropuertos del país para dotarlos de mayor comodidad para los usuarios, pero fundamentalmente para lograr un mayor rango de seguridad”, destacó.
Agregó que también se firmó una “alianza estratégica con el Invap (Investigaciones Aplicadas) para trabajar en el sistema de radares”, y que “se está avanzando en la redefinición del Espacio Aéreo Baires, que implica un proceso muy importante”.
Si bien no hay información oficial, el hecho ocurrió el domingo, cuando un avión de la compañía Austral que provenía de Resistencia y se dirigía hacia Aeroparque le reclamó a la Torre de Control de Ezeiza que estuvo “por momentos a 300 pies” de una aeronave de Avianca que se dirigía al aeropuerto de Sauce Viejo, Santa Fe.
“Estuvimos a 500 pies, por momentos a 300 pies de diferencia con el tránsito que nos sobrepasó de derecha a izquierda…”, se escucha decir al piloto en el audio que se viralizó en redes sociales, mientras que la controladora responde: “Sí, correcto señor, la verdad tiene razón”.
La mujer le pide luego que “formule la queja por escrito” y le indica que lo ocurrido es consecuencia de la “saturación del área”.
“La verdad es que son unos inútiles, ese es el problema”, contesta el hombre, y la mujer responde “¿Si? venga a decírmelo personalmente, por favor. Idiota”.