Este martes, el avión de la Fuerza Aérea de México que trasladaba a Evo Morales y Álvaro García Linera aterrizó para darles asilo al ex presidente y vicepresidente boliviano. El avión arribo tras partir del aeropuerto internacional de Asunción, en Paraguay.
A la capital paraguaya arribó Morales junto a su vice y familiares tras salir de Bolivia.
Tras poner un pie en suelo mexicano, Evo pronunció un discurso en el que reiteró que fue víctima de un golpe de Estado y sostuvo: “Mientras tenga la vida, sigue la lucha”.
Además, denunció que un miembro de su equipo de seguridad le mostró un mensajes que recibió para que lo entregara a cambio de U$S 50.000. “Tras el triunfo de las elecciones empezó el golpe de Estado”, reiteró al igual que lo hizo el domingo pasado.
El derrocado presidente boliviano recibirá en México el trato de asilado político.
“Ayer quemaron la casa de mi hermana”, añadió Evo Morales y aseguró ante este escenario de violencia que el presidente de México, Andrés López Obrador, “me salvó la vida”.
«Mientras esté vivo voy a seguir en política”, añadió el líder boliviano.
“Si algo de delito tengo, es (que soy) indígena. Si algo de pecado tenemos con el hermano vicepresidente es que hemos implementado programas sociales para los más humildes. Nuestro peor delito o pecado es que ideológicamente somos antiimperialista”, remarcó.
Momentos después, Morales subió a un helicóptero militar que lo trasladó a su nueva residencia.
Fuente: Télam / ámbito.com