Un viticultor austríaco realizó un sorprendente descubrimiento mientras renovaba su bodega en Gobelsburg, a unos 75 kilómetros al oeste de Viena. Andreas Pernerstorfer encontró huesos de mamut de hasta 40.000 años de antigüedad enterrados en el suelo de su bodega, según confirmó el Instituto Arqueológico Austriaco.
El hallazgo se produjo cuando Pernerstorfer estaba nivelando el suelo durante unas obras de mejora. Al encontrarse con varios huesos de gran tamaño, avisó de inmediato al Instituto Arqueológico Austriaco para que realizaran un análisis detallado.
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Los expertos indican que los restos están en muy buenas condiciones y se cree que pertenecen a tres mamuts distintos. Según el diario regional Niederösterreichischen Nachrichten, este descubrimiento es el más importante de los últimos cien años en Austria. La arqueóloga Hannah Parow-Souchon destacó que es una oportunidad única para la investigación con métodos modernos.
Hace 150 años, en un sótano adyacente, ya se habían descubierto objetos de sílex, joyas fósiles y carbón vegetal. Los científicos creen que los mamuts podrían haber muerto durante una cacería en el lugar donde se encontraron los huesos.
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Tras el análisis completo, los huesos serán entregados al Museo de Historia Natural de Viena para su restauración y exhibición.
FUENTE: DW.