Estuvo en el Ecoparque porteño y será recibida en un santuario de Mato Grosso.
Pupy, una elefanta africana de 35 años, dejó el Ecoparque porteño tras pasar más de tres décadas en cautiverio. Fue trasladada al Santuario de Elefantes en Mato Grosso, Brasil.
El viaje, de 2.700 kilómetros, fue posible gracias al trabajo conjunto entre el Ecoparque, Senasa y autoridades brasileñas, que emitieron los permisos sanitarios.
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Antes del traslado, Pupy pasó por pruebas diagnósticas y un entrenamiento para adaptarse a la caja de transporte. El lunes partió desde Buenos Aires.
El martes cruzó el puente Tancredo Neves, que une Puerto Iguazú con Foz de Iguazú. Allí se controló su estado y el transporte.
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El santuario brasileño ofrece un entorno natural para elefantes rescatados. Allí ya viven otras cinco elefantas, entre ellas Mara, también llegada desde el Ecoparque en 2020.
Pupy vivirá sus días en semi-libertad, tras una vida entera bajo el encierro del ex Zoológico porteño.