Keir Starmer, líder de la oposición británica, ha declarado su intención de reconocer un Estado palestino si su partido gana las próximas elecciones generales. Sin embargo, aclaró que esta medida deberá tomarse en el momento adecuado y en un entorno de paz.
España, Irlanda y Noruega han anunciado esta semana su reconocimiento de un Estado palestino a partir del 28 de mayo, lo que provocó una respuesta airada de Israel. Este país consideró que la medida era una «recompensa por el terrorismo» y, en consecuencia, retiró a sus embajadores de las tres capitales.
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El Partido Laborista Británico ha estado envuelto en una disputa interna sobre su política hacia el conflicto en Gaza, especialmente después del ataque de Hamás del 7 de octubre que llevó a la invasión israelí. Starmer ha enfrentado críticas de algunos de sus partidarios tradicionales por su gradual cambio de posición hacia el apoyo a un alto el fuego en Gaza.
Esta postura llevó a la renuncia de 10 legisladores de alto rango y se señaló como una de las causas de los resultados decepcionantes en las recientes elecciones locales en áreas con grandes poblaciones musulmanas.
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En una entrevista con la BBC, cuando se le preguntó sobre la creación de un Estado palestino, Starmer respondió: «Sí, lo creo, y creo que el reconocimiento de Palestina es extremadamente importante. Necesitamos un Estado palestino viable junto con un Israel seguro y protegido, y el reconocimiento tiene que ser parte de eso.»
Starmer subrayó que una solución de dos Estados es esencial para una paz duradera en la región, una posición que ha sido durante mucho tiempo el marco de la política exterior británica y de los esfuerzos internacionales para resolver el conflicto. Sin embargo, este proceso de paz ha estado estancado durante años, según informó Reuters.
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El actual gobierno conservador y otros grandes Estados europeos como Francia y Alemania también han expresado su apoyo en principio a un Estado palestino, pero señalan que el reconocimiento debe formar parte de un proceso de paz más amplio.
Esta semana, el Partido Laborista apoyó la independencia de la Corte Penal Internacional tras solicitar órdenes de arresto tanto para Hamás como para funcionarios israelíes por crímenes de guerra, marcando una división con el gobernante Partido Conservador.
Fuente: Noticias Argentinas
