El empresario Elon Musk anunció que a partir de mayo disminuirá significativamente el tiempo que dedica al Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE), un organismo que impulsó junto al gobierno de Donald Trump. Su enfoque volverá a centrarse en Tesla tras una fuerte caída en sus beneficios.
Durante una teleconferencia con analistas del sector automotor, Musk reveló que solo dedicará “uno o dos días a la semana” al DOGE, priorizando su compromiso con Tesla, cuyo beneficio neto se desplomó un 71 % en el primer trimestre de 2025, alcanzando apenas 409 millones de dólares.
El magnate aseguró que el trabajo inicial del DOGE ya está mayormente cumplido. «La labor del departamento es muy importante, pero gran parte de la estructura ya está establecida», explicó, justificando su menor presencia operativa en los próximos meses.
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El DOGE fue creado para combatir el malgasto y el fraude dentro del gobierno federal estadounidense, y según Musk, “ha hecho un gran progreso” desde su fundación.
A pesar de su distanciamiento parcial, Musk aclaró que seguirá colaborando con el DOGE mientras el presidente Trump lo considere útil: “Creo que continuaré un día o dos a la semana mientras que el presidente quiera que lo haga”.
El movimiento ocurre en medio de tensiones económicas para Tesla, que enfrenta una reducción significativa de ingresos, lo que obliga a su CEO a redoblar esfuerzos para recuperar la rentabilidad de la empresa.
FUENTE: DW.