Se trata de dos vecinos de la Capital de Neuquén que han fabricado un respirador artificial de bajo costo a partir del motor de un limpiaparabrisas.
Los autores de la creación fueron Gustavo Zaldúa y Dardo Forestier quienes decidieron ponerse a trabajar en el proyecto con los recursos que tenían a mano.
Fue así que lograron construir este respirador de “emergencia automático” que puede ayudar a las personas que lo requieran en el contexto de la emergencia sanitaria.
Como se mencionó, este prototipo alimentado a batería funciona con un motor de limpiaparabrisas y cuesta mucho menos que cualquier aparato similar en el mercado.
La construcción del respirador demandó cerca de 40 días y esta semana fue terminado el primer prototipo.

De acuerdo a lo explicado por los inventores, se trata de un equipo resucitador de emergencia o AMBU (por sus siglas en inglés), utilizados en ambulancias con bombeo manual. A partir de este elemento, los neuquinos lo colocaron este motor, lo alimentaron con una batería y le instalaron reguladores para el ritmo, volumen de aire y oxígeno.
Al respecto, los hombres reconocieron que al carecer de conocimientos de medicina, consultaron a expertos del hospital Bouquet Roldán de Neuquén y con especialistas de la fundación Favaloro, que están fabricando artículos similares en Buenos Aires.
“Tomamos lo que servía y mejoramos lo que no nos convencía, así que de alguna manera hicimos un producto propio”, explicó uno de los inventores.
Fuente: lmneuquen.com