Ocho niños y una mujer fallecieron en la isla de Pemba, Zanzíbar, tras consumir carne de tortuga marina, desencadenando una alerta sanitaria en la región.
En una lamentable tragedia en la isla de Pemba, en el archipiélago de Zanzíbar, ocho niños y una adulta perdieron la vida después de ingerir carne de tortuga marina, mientras que otras 78 personas fueron hospitalizadas, según informaron las autoridades el sábado.
A pesar de ser considerada un manjar por los habitantes locales, la carne de tortuga marina conlleva riesgos de quelonitoxicismo, un tipo de intoxicación alimentaria que periódicamente causa víctimas mortales en la región.
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La adulta fallecida el viernes por la noche era la madre de uno de los niños afectados, confirmó el médico del distrito de Mkoani, Dr. Haji Bakari. Según Bakari, el consumo de la carne de tortuga se realizó el martes anterior. Las pruebas de laboratorio confirmaron que todas las víctimas habían consumido carne de tortuga marina.
Ante esta emergencia, las autoridades de Zanzíbar, una región semiautónoma de Tanzania, desplegaron un equipo de gestión de desastres encabezado por Hamza Hassan Juma, quien hizo un llamado a la población para evitar el consumo de tortugas marinas.
Esta tragedia evoca un incidente similar en noviembre de 2021, cuando siete personas, incluido un niño de 3 años, perdieron la vida en Pemba después de consumir carne de tortuga, mientras que otras tres fueron hospitalizadas.
Fuente: El Mundo