En un giro político de alto impacto, el presidente de Colombia, Gustavo Petro, confirmó que convocará por decreto una consulta popular sobre su reforma laboral, tras acusar al Congreso de bloquear el proceso de manera fraudulenta. El mandatario busca llevar sus propuestas directamente al pueblo luego de varios intentos fallidos de aprobación legislativa.
La reforma tiene como meta ampliar los derechos laborales en el país, pero enfrenta fuerte resistencia en el Congreso. Un primer proyecto fue rechazado en abril y luego, en mayo, una propuesta de referendo popular con 12 preguntas también quedó trabada en el Senado, en una votación que Petro califica como “confusa y manipulada”.
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En una alocución televisiva el 3 de junio, Petro informó que esta semana firmará el decreto para convocar a la consulta. “La Corte Constitucional tendrá en sus manos el decreto de convocatoria”, aseguró el mandatario, dejando en claro que el tema se resolverá por vía institucional, pero con respaldo directo de la ciudadanía.
El ministro del Interior, Armando Benedetti, anticipó que la consulta se celebraría entre finales de julio y principios de agosto. El Ejecutivo espera que, con la aprobación de la Corte, se abra paso a una votación nacional que legitime las reformas sin pasar por el Congreso.
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Este anuncio plantea un nuevo escenario político en Colombia, donde la relación entre el Ejecutivo y el Legislativo se ha tensado. Con la consulta, Petro busca consolidar su proyecto de transformación laboral y demostrar su apoyo popular frente a una oposición parlamentaria cada vez más desafiante.
Fuente: DW.
Foto: Emilio Flores/Anadolu/picture alliance