Desde este domingo entró en vigor en Francia una nueva normativa que prohíbe fumar en playas, parques, jardines públicos y áreas de espera como paradas de colectivos. La decisión despertó rechazo en parte de la población, que la considera «ridícula» o «excesiva».
En la playa de Le Porge, Stéphane, bajo una sombrilla, opinó que «los cigarrillos los metemos en el cenicero, no me parece que esto moleste a nadie». Mientras tanto, otros como Céline Pouillet expresaron su confusión: “Pensaba que la regla se aplicaba desde el 1 de julio y no hoy”.
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La normativa también se aplica cerca de bibliotecas, instalaciones deportivas y escuelas. Las autoridades informaron que se publicará un nuevo pictograma para señalizar los espacios libres de humo.
La sanción para quienes infrinjan la norma será de 135 euros, con posibilidad de elevarse hasta 750. Sin embargo, algunos dudan de su implementación: “¿Quién va a multar? Será imposible vigilar las playas”, sostuvo Marie Laurent, jubilada.
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Otros, en cambio, celebran la iniciativa. «Es bueno para los niños, así no quedan expuestos al humo», valoró Romain Boonart. El Ministerio de Salud aseguró que habrá un período de pedagogía antes de aplicar la norma con rigor.
Fuente: AFP.
Foto: France24.