Fue este viernes en actuaciones que hizo la policía en barrio INTA buscando las armas usadas en la balacera del domingo pasado y además del rodado sustraído encontró en uno de los domicilios allanados marihuana, cocaína y una balanza de precisión.
Los procedimientos fueron realizados entre las ocho de la mañana y el mediodía en domicilios situados en las calles Dolavon al 4400, Dolavon al 4470, Gales casi Cholila, y Dolavon 4473 en donde durante el registro del lugar hallaron una motocicleta marca Keller, de mediana cilindrada, que fue denunciada como sustraída hace unos meses en la comisaría Segunda de esta ciudad, algunas municiones, un almacén cargador de una pistola, una pistolera, un separador de municiones. Cuatro “plantines de marihuana”, una balanza de precisión y un envoltorio con cocaína de unos dos gramos.
Aquí fue que a uno de los moradores del domicilio lo demoraron al momento en que intentó tirar por el inodoro del baño la cocaína que le terminaron secuestrando.
Con respecto al resultado de los otros allanamientos, se conoció que solo en el inmueble de Dolavon 4495 hubo secuestros; ahí incautaron dos balas calibre 22 y otra 9 milímetros.
Ahora, llama la atención que el fiscal haya tardado cinco días en pedir las órdenes de allanamiento después del hecho ocurrido el domingo pasado en el que una banda de malvivientes atacó a balazos una vivienda del barrio INTA cuando la estaba ocupando la familia que se la había comprado a una mujer que decidió venderla luego que los mismos delincuentes se la prendieran fuego y la balearan.