Jannik Sinner (1° del mundo) sigue demostrando por qué es el gran favorito en Roland Garros. En su regreso a la élite tras una sanción, el italiano no pierde el paso: derrotó con contundencia al ruso Andrey Rublev (15°) por 6-1, 6-3 y 6-4 en una hora y 59 minutos.
El nacido en San Cándido jugó a un nivel altísimo, sin mostrar fisuras en su juego. Desde el fondo de la cancha, dominó cada punto con autoridad. Su desempeño físico y mental es tan sólido que parece inmune a la presión y los vaivenes del partido.
«Gracias a Dios me siento fresco y mentalmente enfocado. Pude jugar muy bien desde el inicio y nunca solté el control del partido», expresó Sinner tras su victoria en la Philippe Chatrier, confirmando el buen momento que atraviesa en el circuito.
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Rublev ofreció resistencia, pero nunca logró quebrar la solidez del N° 1. Aunque el tercer set fue más parejo y exigió a Sinner a trabajar cada punto, el italiano mantuvo la calma, cometió pocos errores y selló su pase a cuartos sin ceder un solo set en el torneo.
En la próxima ronda, Sinner enfrentará a Alexander Bublik (62°), quien dio la sorpresa al eliminar al británico Jack Draper (5°). Con el historial 3-1 a su favor, el pupilo de Darren Cahill buscará dar otro paso hacia su primer título en Roland Garros.
Fuente: ESPN.