La guerra comercial entre Estados Unidos y China sumó un nuevo capítulo este martes, cuando la Casa Blanca anunció un arancel del 245 % a China. La medida se aplicará a las exportaciones del país asiático que ingresen al mercado estadounidense.
El presidente Donald Trump justificó la decisión como una respuesta directa a las represalias de Pekín, que días antes suspendió exportaciones clave de minerales raros e imanes, esenciales para industrias estratégicas como la automotriz, tecnológica y militar.
La Casa Blanca alertó que esta dependencia de materiales críticos extranjeros pone en riesgo la seguridad nacional de EE.UU. y su infraestructura. “Estamos expuestos a interrupciones y coerción económica”, señalaron desde el gobierno norteamericano.
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Actualmente, los aranceles de EE.UU. a productos chinos ya se ubicaban en un 145 %, mientras que China aplica tasas del 125 % a bienes estadounidenses. La medida eleva aún más la tensión comercial entre las dos mayores economías del mundo.
El 2 de abril, Trump había ordenado aranceles recíprocos masivos a varios socios comerciales. En ese marco, China fue uno de los países más afectados, con un incremento del 54 % en sus productos exportados a EE.UU.
Finalmente, Trump indicó que China debería seguir el camino de otros países que han negociado con Washington. “Simplemente no saben cómo hacerlo”, expresó el mandatario, alimentando aún más la controversia diplomática.
Fuente: RT.
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