El presidente Alberto Fernández hizo hoy un llamado a la unidad del oficialismo al afirmar que «los compañeros que plantean disidencias no pueden ser los enemigos», al hablar durante un acto por los 77 años de la creación del sindicato de trabajadores mecánicos Smata, en el centro porteño.
«No olvidemos que debemos estar unidos, la frase que se dijo en la marcha (peronista) ´todos unidos triunfaremos´ tiene razón, porque cuando nos dividieron ganó (Mauricio) Macri. Por eso, los compañeros que plantean disidencias no pueden ser los enemigos», afirmó el jefe de Estado en el acto realizado en la sede de Smata, acompañado por el Secretario General de la Confederación de Sindicatos Industriales (Csira) de ese gremio, Ricardo Pignanelli, el ministro de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas, y el embajador argentino en Brasil, Daniel Scioli, entre otros funcionarios.
«También recordemos que los enemigos no están entre nosotros, los enemigos son los que sumieron a la Argentina en la desgracia. Somos hijos de (Juan Domingo Perón) y Evita (Perón). Solo entendemos una sociedad con derechos. El mérito mueve a la sociedad hacia el futuro si todos tienen las mismas condiciones. Para eso esta el estado, para igualar y dar las mismas condiciones», subrayó.
El mandatario también aludió a quienes «andan dando cátedra de moral y de gobernabilidad por todos los medios de comunicación del país». «No dejan de decir barbaridades, barrabasadas, olvidándose de lo que ellos hicieron», expresó.
En este sentido, afirmó que «entre 2003 y 2015 el salario real en la Argentina creció 19 puntos y entre 2015 y 2019 cayó 20 puntos».
Alberto Fernández reseñó también que durante la gestión de Macri «se perdieron 160.000 puestos de trabajo formales en la actividad industrial» y «el PBI industrial per cápita retrocedió el 17,5%».
«Para nosotros, el trabajo no es un costo, el trabajo ligado al capital es progreso y futuro», remarcó el Jefe de Estado.
«Sepamos dónde estábamos y lo que hicieron los que hoy andan dando cátedra», reiteró el Presidente.
Asimismo, recordó «la indecencia» de haber contraído la deuda con el Fondo Monetario Internacional «que se tuvo que resolver en medio de la pandemia de coronavirus».