Foto: TyC Sports.
Con tan solo dos ingredientes básicos de tu casa vas a poder dejar tu horno como nuevo y sin un arduo esfuerzo.
Limpiar el horno puede ser una tarea complicada y tediosa, pero hay un truco casero que simplifica el proceso utilizando solo dos ingredientes comunes en la cocina. Esta técnica es ideal para eliminar grasa y suciedad sin recurrir a productos químicos agresivos.
El método consiste en mezclar bicarbonato de sodio y vinagre blanco, elementos presentes en casi cualquier hogar que, al combinarse, generan una reacción perfecta para desincrustar manchas difíciles. El bicarbonato actúa como un abrasivo suave, mientras que el vinagre desintegra la grasa y neutraliza olores.
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Para llevar a cabo este proceso de limpieza, solo sigue estos pasos sencillos:
- Retira las bandejas del horno y esparce bicarbonato en las áreas sucias.
- Rocía vinagre sobre el bicarbonato y déjalo actuar por aproximadamente 30 minutos.
- Pasado el tiempo, utiliza una esponja húmeda para remover los restos.
Este método no solo facilita la limpieza, sino que también resulta económico y evita el uso de productos tóxicos, permitiéndote mantener el horno en buen estado y listo para usar, sin olores químicos.
Fuente: TyC Sports.