Foto de archivo.
Desde hace más de cinco décadas, los integrantes del ICB monitorean la salud y comportamiento de las ballenas francas australes.
El Instituto de Conservación de Ballenas (ICB) lleva adelante hace 55 años un seguimiento intensivo de la población de ballenas francas australes en las costas de Chubut. “Conocemos a más de cinco mil ballenas. Casi les sacamos el DNI”, expresó a Radio 3 la integrante del ICB, Roxana Schteinbarg.
Entre los pilares del trabajo del Instituto se destacan la fotoidentificación y el monitoreo de la salud de los ejemplares. También estudian el impacto del cambio climático, la contaminación plástica y las amenazas emergentes, como los proyectos hidrocarburíferos en el Golfo San Matías.
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Uno de los estudios actuales investiga si las ballenas pueden adaptarse a la falta de alimento. Además, se analizan indicadores como el estrés fisiológico, medido a través del cortisol, para conocer el impacto de factores como el tráfico marítimo o los ataques de gaviotas.
El ICB promueve la participación comunitaria mediante la adopción simbólica de ballenas. “A través de sus historias se genera empatía”, conmpletó Schteinbarg. Estos aportes ayudan a financiar investigaciones que permiten proteger a esta emblemática especie.