CIEFAP aportó 140 cipreses cultivados con semillas locales para restaurar el ecosistema dañado por un incendio en 2007.
La Reserva Natural Urbana La Zeta fue escenario de una jornada de restauración ambiental en el cañadón del Cerro Tero, afectado por un incendio en 2007. La actividad, organizada por la Municipalidad de Esquel, contó con la participación de instituciones locales, vecinos, brigadistas y estudiantes.
El aporte central fue realizado por el CIEFAP, que entregó 140 cipreses de la cordillera obtenidos de semillas recolectadas en la zona, de árboles emblemáticos conocidos como «los tres abuelos», sobrevivientes del incendio.
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Los ejemplares, de entre 4 y 6 años, representan una inversión valiosa en términos de cultivo y cuidado. La plantación busca mejorar la resiliencia del ecosistema con material genético adaptado localmente.
Participaron alumnos de escuelas técnicas, la UNPSJB, y representantes de deportes de montaña. Desde el ámbito técnico, acompañaron profesionales del INTA y el propio CIEFAP, a través del técnico forestal Stefano Gianolini. La propuesta forma parte de acciones de restauración iniciadas en 2008, aunque aquella experiencia tuvo escaso éxito por el daño de animales sobre las plantas jóvenes.