El BOJ sube su tasa a corto plazo al 0,5%, marcando un hito tras años de deflación, y confía en el crecimiento salarial como clave para mantener la inflación estable en torno al 2%.
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El Banco de Japón (BOJ) decidió este viernes incrementar su tasa de interés a corto plazo del 0,25% al 0,5%, el nivel más alto registrado desde la crisis financiera global de 2008. En un contexto de creciente presión inflacionaria y aumento de salarios, esta decisión refleja el compromiso del banco central de consolidar la estabilidad económica tras décadas de deflación.
El gobernador del BOJ, Kazuo Ueda, indicó que el yen débil y los aumentos salariales generalizados han impulsado los precios de importación y el costo de vida, asegurando que las decisiones futuras se tomarán en función de los datos disponibles. “No tenemos una idea preconcebida sobre el próximo ajuste, será una decisión basada en el análisis reunión tras reunión”, comentó Ueda en una conferencia de prensa.
El BOJ elevó sus proyecciones de inflación, ahora estimando un 2,4% para el año fiscal 2025, antes de estabilizarse en el 2% en 2026. Este ajuste, combinado con las expectativas de un crecimiento económico moderado del 1,1% para 2025, refuerza la percepción de que Japón podría finalmente estar dejando atrás el estancamiento económico.
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El banco destacó que los riesgos inflacionarios se inclinan al alza, impulsados por la escasez de mano de obra, el impacto de un yen débil y el alza en los precios del arroz y otros alimentos. Según Ueda, la clave para un crecimiento sostenible radica en la consolidación de los aumentos salariales y su impacto en el consumo.
El anuncio tuvo un impacto inmediato en los mercados financieros. El yen se fortaleció un 0,5%, cotizando a 155,32 por dólar, mientras que los rendimientos de los bonos gubernamentales japoneses alcanzaron niveles no vistos desde 2008. Además, los analistas anticipan que el BOJ podría realizar otro incremento de tasas a finales de año, lo que llevaría los tipos al 0,75%.
“La inflación subyacente en Japón alcanzó el 3% en diciembre, el ritmo más rápido en 16 meses. Esto refleja que las empresas están trasladando los mayores costos a los precios finales, mientras los hogares enfrentan un incremento en el costo de vida”, señaló Matt Simpson, analista de City Index.
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Aunque las tensiones comerciales y la política económica de Estados Unidos representan factores de incertidumbre, el BOJ confía en que el crecimiento sólido de la economía estadounidense continuará respaldando a Japón. Este optimismo también se refleja en la eliminación de un énfasis previo sobre los riesgos externos en su comunicado oficial.
El ajuste de las tasas de interés también marca un paso significativo en la transición de Japón hacia una política monetaria más normalizada, tras años de estímulos radicales. Según expertos, este cambio subraya la intención del BOJ de mantener el equilibrio entre un crecimiento sostenido y una inflación moderada.
Fuente y foto: Ámbito Financiero