Murió Pepe Mujica, el símbolo de la izquierda latinoamericana. El expresidente uruguayo falleció este martes a los 89 años, víctima de un cáncer con metástasis hepática. El presidente Yamandú Orsi confirmó la noticia en sus redes sociales y expresó su dolor: «Te vamos a extrañar mucho, viejo querido».
Mujica fue una figura central del Frente Amplio, guerrillero tupamaro en su juventud, preso político durante la dictadura y mandatario entre 2010 y 2015. Su vida transitó de la clandestinidad a la presidencia, sin perder nunca su estilo austero y directo.
Vivía en su chacra en Rincón del Cerro y donaba la mayor parte de su salario. Rechazó los privilegios del poder y predicó con el ejemplo. Durante su gestión, se legalizó la marihuana, se aprobó el matrimonio igualitario y se abrieron las puertas a refugiados sirios.
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En 2020, se retiró de la política activa con un mensaje de paz: “En mi jardín hace décadas que no cultivo el odio”. En 2024 anunció que tenía un tumor en el esófago y que no se sometería a tratamientos invasivos. «La parca viene con guadaña», dijo con ironía.
Su esposa, Lucía Topolansky, había anticipado hace días el delicado estado de salud del exmandatario. Este martes, el desenlace fue comunicado por Orsi, su heredero político. Mujica deja una huella imborrable en la historia latinoamericana contemporánea.