El gobierno de Geert Wilders enfrenta críticas por un plan considerado «totalmente inviable» por la oposición.
El gobierno de coalición de los Países Bajos, liderado por el partido de extrema derecha Libertad (PVV) de Geert Wilders, está estudiando un controvertido plan para enviar a Uganda a los solicitantes de asilo africanos que sean rechazados en su país. La propuesta, presentada durante una reciente visita de la ministra de Comercio y Desarrollo, Reinette Klever, ha generado un amplio debate en la sociedad holandesa y ha sido calificada por los críticos como «totalmente inviable».
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Durante su estancia en Uganda, Klever afirmó que el país del este de África no se opone a recibir a estos solicitantes, aunque no se han proporcionado detalles claros sobre la legalidad y viabilidad del plan. Según informes, los africanos que sean rechazados por el sistema de asilo holandés serán recibidos en Uganda a cambio de compensación financiera. «Al final queremos frenar la migración», declaró la ministra, reflejando así la postura firme del gobierno sobre el control de flujos migratorios.
Sin embargo, las reacciones en Uganda han sido mixtas. Mientras que el ministro de Asuntos Exteriores de Uganda, Jeje Odongo, mostró apertura a discutir la propuesta, otros funcionarios del gobierno expresaron su desconfianza. «No creo que Uganda esté de acuerdo con eso», manifestó Okello Oryem, sugiriendo que el país ya enfrenta un gran desafío al acoger a 1,6 millones de refugiados de conflictos en la región.
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La propuesta ha suscitado críticas dentro de los Países Bajos, donde los políticos de la oposición consideran que el gobierno está distraído de problemas más apremiantes, como la crisis de vivienda y la atención médica. Jesse Klaver, del partido Izquierda Verde, destacó que el gobierno no está cumpliendo con sus responsabilidades internas, mientras que Rob Jetten, líder del D66, lo calificó como un plan «poco meditado» e «imposible de ejecutar», citando experiencias fallidas de políticas. similares en otros países.
Fuente: The Guardian
Foto: EL PAÍS