Enclavado en el Valle Calchaquí a más de 1.800 metros sobre el nivel del mar, el sector vitivinícola de Tucumán se distingue por su compromiso con la calidad. El director ejecutivo del IDEP, Maximiliano Martínez Márquez, destaca el apoyo del instituto para promover vinos únicos que aprovechan las condiciones agroecológicas excepcionales de la región.
Silvia Gramajo, presidenta de la Cámara de Bodegas y Viñedos de Tucumán, resalta la singularidad de los productos del Valle Calchaquí. Con un clima caracterizado por veranos prolongados y suelos arenosos, los vinos tucumanos se benefician de condiciones ideales que garantizan su calidad.
Desde premios nacionales en concursos prestigiosos hasta la Ruta del Vino que invita a explorar las bodegas a lo largo de la Ruta Nacional 40, Tucumán ofrece experiencias enológicas únicas. La diversidad de uvas, desde Torrontés hasta Tannat, y el impacto económico positivo respaldan la reputación de esta región vitivinícola.
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Fuente: eltucumano