Una hora habría estado a la intemperie y a su suerte el bebé recién nacido hallado por un vecino en barrio Confluencia alrededor de las 10 de la mañana de este 9 de Julio. Así lo indicó el director del hospital Castro Rendón, Adrián Lammel, que agregó que el pequeño fue internado con signos de hipotermia pero se encuentra fuera de peligro.
En declaraciones a LU5, Lammel sostuvo que el pequeño, al ser hallado en inmediaciones de calles Chos Malal y Ricchieri, llevaba poco horas de nacido. «Pesa 2,800 kilos», indicó.
El médico contó que «llevaba un buen tiempo en la caja, al menos una hora» por lo que «sufrió una quemadura leve (por el frío, a esa hora la temperatura rondaba los 4°C) en uno de sus bracitos», la que es evaluada por el personal de Neonatología donde está internado.
Un aspecto no menor que llamó la atención de los médicos que atendieron al bebé es que el cordón umbilical tenía un broche (cierre) similar a los que se utiliza en las salas de partos de los centros de salud por lo que se hizo una averiguación en hospitales y clínicas pero no había registros de ningún nacimiento.
«Generalmente cuando es un parto domiciliario lo atan con un cordón o un hilo pero en este caso tenía este broche», puntualizó Lammel.
El pequeño estaba siendo sometido a distintos estudios para evaluar su evolución al tiempo que se investiga qué habría ocurrido con su madre. En tal sentido, los investigadores policiales realizaban una verificación de las cámaras de seguridad del sector además de la búsqueda de ocasionales testigos.
En el caso interviene la fiscalía y la defensoría de la Niñez y la Adolescencia.
El bebé fue hallado por un vecino en un descampado, dentro de una caja y sólo abrigado por un pañal, minutos antes de las 10 de la mañana de este martes.