Una banda de ladrones de La Plata, cuyo jefe gozaba de prisión domiciliaria, ingresaron a la casa de una anciana rompiendo el portón de su hogar con un auto. Enseguida entraron con escopetas y le pidieron todo el dinero a la mujer que se encontraba en su habitación.
Como su perro ladraba ante la llegada de los delincuentes, lo mataron a balazos para continuar con su robo. Además, torturaron a la víctima que recibió insultos y golpes en todo momento.
La banda fue desarticulada en la zona del Gran La Plata e investigan si estaba compuesta por un hombre que tenía arresto domiciliario y también por dos menores de edad.
Fuente: viaszeta.com