Raúl Horacio Quinteros tiene un don especial para capturar imágenes del grupo de animales más diverso que se conoce de la tierra. Utilizando su viejo celular y una lupa los insectos cobran vida en sus fotografías.
Pero su pasión no se limita sólo a la fotografía. Es un futbolista apasionado que viaja en bicicleta todos los domingos desde Dolavon hasta Trelew para jugar sus partidos, sin importar las condiciones climáticas.
Además es muy sabio por haber realizado la lectura de cientos de libros a lo largo de su vida. Su conocimiento en diversas áreas es destacado, y su compromiso con el cuidado de las especies vivas, también.
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Definitivamente las fotografías del vecino de Bethesda tienen un poder mágico. Al observarlas detenidamente, los insectos cobran vida y por este motivo desde El Valle Online creemos que merece un reconocimiento y la admiración por parte de todos aquellos que valoran la belleza y la preservación de la naturaleza.
