En una jornada llena de definiciones, la senadora y precandidata a vicepresidenta, Cristina Kirchner presentó su libro «Sinceramente» en Santiago del Estero, en su primera parada de los recorridos de campaña que la exmandataria realizará por el interior de la Argentina.
«Ya fui presidenta y siento la necesidad de ayudar y colaborar a terminar con esta catástrofe que viven hoy los argentinos y las argentinas», dijo la ex mandataria sobre un escenario ubicado en el hotel Forum de la capital provincial antes un auditorio colmado de gente.
«Quiero que sepan de mi absoluto compromiso para trabajar por este país, que va a atravesar grandes dificultades. Mentiría si les dijera lo contrario. Es imposible solucionar mágicamente un endeudamiento tan brutal. En 2003 la deuda era de 9 mil millones y pico de dólares, ahora es de 57 mil millones», remarcó.
La ex mandataria también habló acerca de las razones que la llevaron a escribir su libro: «todo empezó queriendo contar determinadas cosas que sucedieron en nuestro gobierno y también contar nuestra vida con Néstor y nuestros hijos, a quienes también quisieron convertir en monstruos», sostuvo.
«Siempre pienso, qué hubiese pasado si Perón y Evita hubieran tenido un hijo, después de lo que le han hecho a los míos. Si le han hecho eso a un cadáver, qué hubiera sido si ellos hubieran tenido un hijo», se preguntó.
En otra parte de la charla que compartió con un representante de Penguin Random House, editorial que publicó su libro, habló sobre «la parte buena» de Gobierno de Cambiemos.
«A lo malo hay que encontrarle la parte buena. Hemos podido comprobar en un muy corto plazo que todo eso que nos habían dicho que teníamos que hacer y no hicimos, no resultó. Teníamos razón en no hacer una apertura indiscriminada de la economía que destruyera la industria nacional; teníamos razón cuando decíamos que teníamos que sostener el mercado interno y el consumo; teníamos razón cuando decíamos que teníamos que reservar nuestros dólares para los insumos industriales», enumeró. Y continuó: «El camino no es exactamente lo que hicimos, porque nunca el río es el mismo. Pero lo importante es ver para qué lado va el río para poder tener la fuerza de saber lo que tenemos que hacer».
Sobre el final, la pre candidata a vicepresidenta repitió el llamado a los argentinos a hacer un «nuevo contrato social»: «Vamos a tener que hacer un nuevo contrato social de ciudadanía responsable. Estamos a tiempo de mirar lo que nos pasó, lo que nos esta pasando y a partir de allí construir una mirada común que no quiere decir pensar igual, pero sí llegar a acuerdos básicos sobre las cosas que nos permitan volver a pensarnos como un país con futuro».
Más temprano, el anuncio de la fórmula Macri-Pichetto sacudió el tablero político que ya venía agitado por a reunión entre el líder del Frente Renovador, Sergio Massa y la primera plana del PJ, donde selló el acuerdo con el espacio que integra la exmandataria.
En este contexto, Cristina Kirchner inició sus presentaciones en el interior del país. Con la excusa de la presentación de su libro, la senadora recorrerá las provincias para encabezar actos con una estética cercana a presentaciones culturales, en un intento de alejarse lo más posible de la liturgia peronista.
La última vez que la ex mandataria encabezó un acto fue el pasado 25 de mayo en Merlo, donde se presentó de manera formal la fórmula que integra como vice de Alberto Fernández.
Tras ese acto, solo se mostró en Comodoro Py, donde presenció tres de las cuatro audiencias del juicio por la causa «Vialidad» en la que está acusada de ser parte de una asociación ilícita; y en el Congreso de la Nación donde participó de una reunión de labor parlamentaria.
Fuente: www.perfil.com
