Sufrió una descompensación por “la huelga de hambre” que viene llevando adelante desde hace más de 20 días, quejándose de un “ilegitimo agravamiento en sus condiciones de detención”. Este lunes antes del mediodía fue trasladado al hospital desde el Centro de Detencion al que había regresado hace pocos días después de haber estado en la Alcaidía Policial de Trelew y en el Instituto Penitenciario Provincial que está camino a Madryn. Su estado de salud, según Jessica, la hija, sería delicado. Romero está en la cárcel con prisión preventiva desde mediados del año pasado, imputado de haber querido asesinar a tiros a un tapicero en un intricado caso que dentro de poco tiempo sería ventilado en juicio oral y público.
La hija de Romero, que hace poco se recibió de abogada, habló este lunes por Radio 3 AM 780 a propósito del estado de salud de su padre, y cuando se le preguntó sobre el porqué de la huelga de hambre explicó: “Él ha sido alojado en lugares en donde hay condenados y debe estar separado de ellos, porque está procesado, no condenado. Y además, por los lugares en los que fue alojado: en condiciones infrahumanas”, remarcó.
“Él sufrió un constante manoseo”, aseguró y contó: “Estuvo en el Centro de Detención, de ahí lo mandaron a una celda de aislamiento en la Alcaidía. Después lo llevaron al IPP (Instituto Penitenciario Provincial camino a Madryn), de ahí volvieron a traerlo a la Alcaidía, en el pabellón número 5 que es una celda de aislamiento”, indicó.
“Es más, el día jueves de la semana pasada un juez hizo una inspección ocular en la que constató las condiciones infrahumanas en las que se encontraba mi padre. En virtud de ello, se ordenó el traslado al Centro de Detención –nuevamente– al pabellón número 3 en el que hay condenados. O sea, es un círculo vicioso todo esto”, denunció.
“A él lo trasladan a un lugar con condenados, se presenta un Habeas Corpus y lo llevan a otro que no cuenta con las condiciones edilicias”, añadió.
“Es más, desde el área Penitenciaria (de la policía provincial) se dice que no hay un lugar en donde alojarlo a mi papá”, dijo Jessica Romero. “Entonces no encontramos la justificación del porqué lo tienen en estas condiciones”, aseguró. “¿Por qué no le dan una prisión domiciliaria?”, preguntó.
“En todas las audiencias se la solicitó y lo que agregan es el peligro de fuga que está totalmente desvirtuado. Él estuvo siete meses en el Centro de Detención (aledaño a la Comisaría Tercera de Trelew), en el área externa, y como es de público conocimiento allí hay mínima vigilancia, tuvo posibilidades de fugarse y no lo hizo porque él no se va a sustraer el proceso que tiene en contra”, expresó la hija del abogado preso.
Romero está desde ayer en el hospital público de Trelew, se dice, “en estado bastante complicado” y la familia, su hija, los abogados que lo patrocinan esperan la respuesta de parte del juez con respecto a los tres “habeas corpus” que han presentado, en donde –fundamentalmente– piden una morigeración en las condiciones de encierro del letrado; ahora, teniendo en cuenta las consecuencias de la huelga de hambre que está llevando adelante desde hace más de veinte días.
Finalmente ayer se le preguntó a la hija sobre cómo vio a su padre y describió: “Él, está internado ahora en el hospital zonal y allí lo van a dejar no sé por qué cantidad de tiempo porque su estado físico es preocupante”. ¿Cuánto estaba pesando antes de que comenzara con la huelga de hambre? Se le consultó. “Bajó 15 kilos, pesaba casi 80 y ahora está pesando 65. Solo en los últimos días bajó 6 kilos, una cuestión que a los mismos médicos les llama la atención”, contó la joven.