Tras la aprobación del Parlamento, Kithure Kindiki asume la vicepresidencia en medio de críticas por la respuesta policial a las recientes protestas en Kenia.
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Kithure Kindiki, ex ministro del Interior de Kenia, se convertirá en el próximo vicepresidente del país tras la aprobación de su nominación por parte del Parlamento. Su ascenso llega en un contexto marcado por la violencia y la represión policial durante las protestas antiimpuestos que estallaron en junio, resultando en más de 40 muertes y 300 heridos.
La aprobación de Kindiki se produce después de que los senadores destituyeran a Rigathi Gachagua en una serie de votaciones de impeachment. Durante su gestión, Kindiki supervisó la respuesta a las manifestaciones, elogiando a las fuerzas de seguridad por ejercer «moderación» en su accionar. Sin embargo, su defensa de la policía ha generado indignación pública y críticas de grupos de derechos humanos que exigen justicia para las víctimas de la represión.
A lo largo de su carrera, Kindiki ha sido un cercano aliado del presidente William Ruto, habiendo incluso trabajado como su abogado en un caso ante la Corte Penal Internacional hace más de una década, relacionado con la violencia post-electoral de 2007. Este pasado lo ha consolidado como una figura clave dentro del gobierno, particularmente en la región del Monte Kenia, donde se espera que su nombramiento refuerce el apoyo presidencial.
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Con una sólida formación académica, incluyendo una maestría y un doctorado de la Universidad de Pretoria, Kindiki ha contribuido con más de 30 publicaciones en temas de políticas públicas y gobernanza. Su carrera política comenzó en 2013 como senador por Tharaka-Nithi, y ha ocupado posiciones de liderazgo en el Senado hasta su designación como ministro del Interior en el gabinete de Ruto.
A pesar de su trayectoria, la reciente controversia sobre su papel en las protestas plantea interrogantes sobre su capacidad para unir a un país dividido. Además, la juramentación de Kindiki ha sido suspendida por el Tribunal Superior de Nairobi, que está considerando un caso relacionado con la destitución de Gachagua.
Si se confirma su nombramiento, Kindiki se enfrentará al desafío de demostrar su lealtad y seguir las pautas del gobierno en un clima político tenso, donde la presión para abordar las preocupaciones de derechos humanos y la injusticia social es más fuerte que nunca.
Fuente y foto: BBC