Gabriel Rosenstein, un médico argentino radicado en Israel, fue testigo directo del reciente ataque iraní al hospital Soroka de Beerseba, el principal centro de salud del Néguev.
“Los daños son muy graves. El hospital está parado”, declaró en una entrevista con TN, mientras mostraba videos que evidencian la destrucción causada por un misil de una tonelada.
Rosenstein relató que se dirigía a trabajar cuando recibió una alerta por un ataque inminente. Buscó refugio debajo de un puente y poco después supo que el hospital había sido impactado. “Me encontré con mucha gente afuera, un edificio destruido, fuego por todas partes”, contó. La evacuación previa de ciertas zonas del hospital evitó que hubiera víctimas fatales.
MIRÁ TAMBIÉN | Cayó en Córdoba por vender droga con ayuda de su hija
El cardiólogo explicó que sólo funcionan quirófanos especialmente reforzados para emergencias, por lo que la atención está limitada a casos de vida o muerte. “Estamos sin recursos para ayudar a la población local”, lamentó, y recordó que Beerseba no tiene instalaciones militares, por lo que considera el ataque como un acto deliberado contra civiles.
El ataque forma parte del creciente conflicto entre Israel e Irán. Hasta el momento, se han reportado al menos 47 heridos. El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, advirtió que “el líder supremo iraní pagará por sus crímenes”, mientras que el ministro de Defensa, Israel Katz, afirmó que el ayatolá Ali Jamenei “ya no puede seguir existiendo”.
Rosenstein destacó que la ciudad alberga una población mixta, en su mayoría musulmana, y condenó la agresión. “Estos misiles no matan solo judíos. Matan a todos. Están atacando civiles adrede”, concluyó con profunda preocupación ante un conflicto que sigue escalando.
Fuente: TN.