La efeméride celebra el legado de Carlos Gardel y Julio de Caro, figuras clave del tango argentino, género que fusiona influencias africanas, americanas y europeas.
MIRÁ TAMBIÉN | Microdosis de hongos: ¿Realidad o efecto placebo para la salud mental?
Cada 11 de diciembre, Argentina celebra el Día Nacional del Tango, una fecha que rinde homenaje a dos de los máximos exponentes del género: Carlos Gardel y Julio de Caro, nacidos en la misma fecha con nueve años de diferencia. Gardel, ícono internacional y considerado el máximo intérprete del tango, nació en 1890, mientras que De Caro, destacado violinista, compositor y director de orquesta, llegó al mundo en 1899.
La instauración de esta efeméride se debe al impulso del compositor y productor artístico Ben Molar, quien en 1965 propuso la fecha para resaltar la relevancia cultural del tango en la identidad argentina. Su propuesta fue oficializada en 1977, a través de un decreto municipal primero y uno nacional después, estableciendo esta conmemoración anual.
MIRÁ TAMBIÉN | De «Violetta» a «Quebranto»: Tini Stoessel vuelve a la ficción
El tango, que nació en los márgenes porteños a fines del siglo XIX, es mucho más que un género musical. Se trata de una expresión artística y cultural que combina danza, música, poesía y narrativa. Su origen es un crisol de influencias africanas, americanas y europeas, con elementos tan diversos como el candombe negro, la habanera cubana, la milonga criolla, el bandoneón alemán, y la nostalgia de los inmigrantes italianos y españoles.
El término «tango» proviene del bantú, lengua de los esclavos africanos traídos a América, y su evolución refleja el mestizaje cultural que caracteriza a Buenos Aires. Desde sus primeras expresiones en los arrabales hasta su consagración en los salones de París, el tango pasó de ser un fenómeno marginal a convertirse en un símbolo de la identidad argentina.
Hoy, el Día Nacional del Tango no solo celebra la memoria de Gardel y De Caro, sino que también pone en valor el impacto global de este género, declarado Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por la UNESCO en 2009. Es un momento para reflexionar sobre su riqueza cultural y su capacidad de emocionar a generaciones de argentinos y amantes del tango en todo el mundo.
Fuente: Ámbito Financiero
Foto: Archivo